"El mundo del trabajo de estas mujeres no deben ser entendido como una esfera aislada de la vida, ni visto como un mero dispendio de fuerza de trabajo, de energías. En otras palabras, el trabajo no debe ser visualizado en términos de brazos y manos, sino como una actividad de la vida" (Pág. 42 Moraes, M. 1995 Las que viven por sus manos en la agricultura)
Como dice el párrafo anterior, el trabajo no debe ser visto como un mero medio de producción ajena a la vida social y cultural, al contrario, se encuentra inmerso dentro de este mundo. En el caso de las mujeres temporeras, llamadas oficialmente como Trabajadoras agrícolas de temporada, no solo se ha observado una feminización del trabajo, donde la mujer se incerta en el campo laboral, sino también, observamos la tendencia paradójica de la vuelta al agro, es decir, si en un tiempo hubo una fuerte migración del campo hacia la ciudad, en muchas partes del país observamos que actualmente, existe una movilidad local desde la ciudad hacia el agro, sin embargo, lo que difiere es la finalidad, si la migración hacia del campo hacia la ciudad era por motivos de vivir y establecer en la ciudad, en este caso observamos que la movilidad que existe son por fines laborales, sin embargo, esto afecta a la reproducción del hogar, entre estos, la mantención, cuidado, y crianza de los hijos. Como también, observamos la gran carga de las mujeres, ya no sólo se encarga del ámbito doméstico/reproducción del hogar, sino también, en la mantención económica del hogar, y para esto, salen a trabajar, sin embargo, en el caso de las temporeras, esto es más complejo, ya que ellas deben emigrar muchas veces de sus hogares, vemos en el país mujeres y hombres yendo hacia Copiapó para la uva, hacia la VI región para continuar con la uva o seguir con las manzanas, y hasta al sur de Chile o bien en el extremo norte de Chile. Lo cual, es un gran costo que deben tener en relación al alejarse de su hogar.
Por último, la gran jerarquización existente dentro de los trabajos agrícolas, que muchas veces generan una segragación, donde también van a diferir los sueldos, las condiciones de trabajo y el tipo de trato. Pero esta jerarquía es machista, son los hombres que tiene importantes cargos dentro de las empresas siendo las mujeres las principales y mayoritariamente peones, en cambio los hombres poseen mejores cargos, sueldos, trato y por último, mayor accesibilidad a un contrato indefinido, o por lo menos definido.
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